¡¡¡HOLA!!! Queridos lectores, siento la demora en publicar nuevas entradas. Ando de vacaciones aún y descansando tras haber acabado por fin todos los exámenes. Os dejo la entrevista a otro autor, cuya novela se encuentra entre mis favoritas, El sótano.
1.-¿En qué momento te planteas que quieres escribir una novela? O mejor dicho, ¿es algo que llevabas pensando desde hace tiempo, algo así como un sueño?
Desde que escribo, siempre hay ideas rondando mi cabeza. La experiencia me ha enseñado que el exceso de entusiasmo no es bueno. Las ideas deben reposar y madurar. Cuando les llega su momento –o, al menos, a mí me lo parece–, empiezo a escribir.
2.-¿Cuál es tu género preferido?¿Son todas tus novelas del mismo género que a ti tanto te gusta, o el que sueles leer a menudo? Como por ejemplo Stephen King que se centra principalmente en las novelas de Terror.
No tengo un género preferido. Para mí, el género sólo da forma al fondo. Con independencia del género, me gustan las novelas que me aportan algo y, sobre todo, las que me producen envidia sana. Esas que me hacen pensar: “Uf, esto no creo que hubiera sido capaz de hacerlo”.
3.-Al igual que dicen la mirada es el espejo del alma... ¿son tus novelas el reflejo de tu persona? ¿Hasta qué punto vuelcas tu personalidad en alguno de los personajes de la obra?
Mis novelas siempre tienen algo de mí en el sentido más hondo. En cuanto a los personajes, nunca me he inspirado en mí mismo para crear uno, aunque en cierto sentido son un reflejo de lo que pienso, lo que siento, lo que creo que otros piensan o sienten, lo que amo o detesto… Es inevitable.
4.-¿Hay alguna manía que tengas como escritor: alguna hora exacta para escribir, material de escritura, ...?
Todos me dicen que tengo muchas manías, pero yo no me doy cuenta. A mí me parece que son preferencias, no manías, porque soy capaz de adaptarme a todo si no hay más remedio… A la hora de escribir, prefiero la noche. Si una escena no me sale, me tomo una cerveza (o dos). Me gusta más un teclado mecánico que de membrana. No me molestan los ruidos, pero sí (y mucho) que me interrumpan. No se me ocurre nada más… ¿A que no es para tanto?
5.- ¿Cuál es tu novela favorita y de qué autor? ¿Te gusta releerte un libro si te ha gustado mucho?
Evito tener cosas favoritas en ningún sentido (creo que es sano evitar cualquier tipo de catalogación), pero no me importa decir que, ahora mismo, mi novela favorita posiblemente es De ratones y hombres de Steinbeck. Releo mucho, muchísimo; exprimo todo lo que puedo las obras que me apasionan.
6.- Comparte con nosotros algún consejo acerca de la lectura, o como espacio libre para decir unas palabras sobre lo que quieras.
Creo que un gran consejo de lectura se puede extraer del aforismo de Séneca: “No hay que tener muchos libros, sino libros buenos”. Quiero decir que leer mucho o poco no me parece importante, pero sí leer buenos libros. A pesar de que este concepto es discutible, creo que las obras que han perdurado y tienen más de medio siglo, pueden incluirse en esa categoría. Sin desatender las novedades, claro, pero sin ansia de novedad.
También me gustaría citar unas palabras que me marcaron mucho –pensamientos justos, bellos y profundos– que Papini recogía en Gog:
Evito tener cosas favoritas en ningún sentido (creo que es sano evitar cualquier tipo de catalogación), pero no me importa decir que, ahora mismo, mi novela favorita posiblemente es De ratones y hombres de Steinbeck. Releo mucho, muchísimo; exprimo todo lo que puedo las obras que me apasionan.
6.- Comparte con nosotros algún consejo acerca de la lectura, o como espacio libre para decir unas palabras sobre lo que quieras.
Creo que un gran consejo de lectura se puede extraer del aforismo de Séneca: “No hay que tener muchos libros, sino libros buenos”. Quiero decir que leer mucho o poco no me parece importante, pero sí leer buenos libros. A pesar de que este concepto es discutible, creo que las obras que han perdurado y tienen más de medio siglo, pueden incluirse en esa categoría. Sin desatender las novedades, claro, pero sin ansia de novedad.
También me gustaría citar unas palabras que me marcaron mucho –pensamientos justos, bellos y profundos– que Papini recogía en Gog: